jueves, 4 de julio de 2013

La opacidad empresarial: o comunicas tú o comunican por ti

Las reticencias de algunas empresas a la hora de proporcionar datos sobre sus cuentas de resultados son un muro con el que chocan muy a menudo los periodistas económicos. Pero no es infranqueable, tal como explica el jefe de sección del diario Expansión, Sergi Saborit, en el artículo Hágase luz, publicado el pasado lunes. Saborit señala, en primer lugar, que si una compañía no quiere dar información existen muchos otros actores -sindicatos, competidores, jueces, trabajadores o, directamente, altos cargos- dispuestos a difundir datos y que, además, parte de estas cifras se pueden consultar fácilmente en el Registro Mercantil. En segundo lugar, recuerda que, cuanta más resistencia muestren las empresas, más motivado estará el periodista para investigar.

La opacidad informativa de la que se queja el jefe de sección de Expansión es una práctica todavía muy extendida en las empresas y propiciada, en gran parte, por la coyuntura económica. En época de bonanza, los directivos de las empresas acostumbran a tener una actitud de mayor apertura a la hora de informar, sobre todo, si obtienen beneficios. La mayoría están dispuestos a salir en los medios para anunciar un crecimiento de la compañía y sus buenos resultados. En este contexto, es relativamente fácil diseñar las acciones comunicativas. Se puede enviar una nota de prensa, o incluso convocar a los periodistas a una comparecencia pública, y contar con la total disponibilidad de los altos cargos para conceder entrevistas o ampliar información.

No obstante, este escenario cambia por completo en época de crisis. Obviamente, a nadie le gusta ponerse ante los micrófonos para comunicar que su compañía cierra el ejercicio económico con pérdidas. Pero, en realidad, no es nada extraño ni un hecho aislado que una empresa no crezca de un año al otro. Además, acceder a informar sobre estas “malas noticias” da un valor añadido de transparencia y honestidad a la marca. Aunque se intenten tapar o disimular, los periodistas llegarán igualmente a ellas por otras fuentes y acabarán publicándolas. Esto es algo que los profesionales de la comunicación debemos hacer entender a los responsables de las organizaciones; una tarea que no siempre es fácil.

Otra situación habitual que se constata desde las agencias o departamentos de prensa es que, cuando las empresas crecen y aumentan su facturación en plena crisis, algunas optan por esconder estas cifras. Consideran que su éxito desentona en un contexto de recesión y piensan que es mejor no alardear y quedarse en silencio. Sin embargo, esta postura puede resultar contraproducente ya que, tarde o temprano, la información saldrá a la luz y alguien podría interpretar este silencio como un indicio de que la compañía se ha enriquecido de forma poco transparente.

Así pues, con buenas o malas noticias y en mejores o peores momentos, siempre es recomendable comunicar. En una sociedad completamente mediatizada, donde cualquier persona puede consultar datos en Internet y difundir información a través de las redes sociales, las organizaciones deben tomar la delantera y dar explicaciones antes de que alguien lo haga fuera de los canales institucionales. En definitiva, o comunicas tú o comunican por ti.

7 comentarios:

  1. Aunque es cierto lo que decis, muchas veces el no querer comunicar responde a una necesidad de tapar cifras sospechosas o asuntos poco limpios. No es casualidad que los paises latinos seamos mucho menos transparentes y reacios a informar que los del norte. Si los periodistas rascan, la mayoria de las veces encuentran lo que las compañias no quieren que se encuentre..

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  2. Muy interesante el post de esta semana. Felicidades. Ojalá las empresas e instituciones de nuestro país hagan caso de estos consejos, ya que necesitamos una fuerte dosis de transparencia para ganar credibilidad

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  3. Estoy muy de acuerdo con este post. En una sociedad como la nuestra, tan mediatizada, es mejor que sea la misma empresa la que transmita la información. Así es más fácil asegurar que los datos que se difundan sean los correctos. Además, dar a conocer la situación económica de la empresa significa transparencia por su parte.

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  4. Moltes empreses encara pensen en paràmetres comunicatius de fa una dècada. És estrany que amb la visió empresarial que tenen, en l'àmbit comunicatiu, siguin tan miops.

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  5. No es un artículo de opinión el que habéis publicado sino una verdad como un templo.Unas empresas lo hace por privacidad, otras por vergüenza, otras para no alertar a la competencia i, otras, por incompetencia manifiesta.

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  6. Crec que és un falta de cultura empresarial del nostre país. Però, si bé és cert que les dades de qualsevol empresa es poden aconseguir del Registre Mercantil, també es cert que acostumen a publicarse amb molt de retard. Per tant, si el periodista no les pot aconseguir de la propia empresa, segurament será perquè ho son massa bones o massa dolentes.

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  7. Estoy muy de acuerdo con todo lo que comentáis, aunque costará hacérselo entender a las empresas. La transparencia no está muy bien vista/valorada en este país...

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