jueves, 11 de julio de 2013

El periodismo ciudadano, un falso tótem

Cualquier ciudadano puede difundir una noticia a través de su teléfono móvil. Publicar entradas en Facebook, escribir microtextos en Twitter o colgar imágenes en Instagram es suficiente para retransmitir un acontecimiento -conferencias, manifestaciones, incidentes, tragedias, etc.- o hacerse eco de una información de manera masiva. Sin embargo, esta tendencia no es nueva. Aunque ahora, con las redes sociales, vive un gran apogeo, nació hace más de una década con la irrupción de Internet y, particularmente, de los blogs.

Se trata del denominado “periodismo ciudadano”, un fenómeno que generó muchas expectativas dentro y fuera del sector ante la extendida crítica a los medios de comunicación por su pérdida de credibilidad. Incluso los más entusiastas vaticinaron que significaría el fin de las empresas periodísticas como se entienden hasta el momento. Pero el tiempo y, sobre todo, los hechos han constatado que era un pronóstico totalmente equivocado.

Evidentemente, las posibilidades que ofrecen las nuevas tecnologías permiten una mayor transparencia y favorecen el derecho a la información de la sociedad. En este sentido, resulta positivo que los medios convencionales hayan perdido el monopolio de difundir información. No obstante, es inconcebible que se pueda prescindir de los profesionales de la comunicación. Se necesitan criterios y técnicas para narrar la actualidad de la manera más precisa, rigurosa y ética posible. Disponer de las nuevas tecnologías no es suficiente, ni tan siquiera estar en el lugar de los hechos en el momento oportuno.

Obviamente, la información que los ciudadanos cuelgan en la Red es de interés y con su participación ayudan a los periodistas a elaborar sus noticias –el envío de fotos y de comentarios sirve para complementar una pieza o para obtener datos a los cuáles no han podido acceder-. Sin embargo, supone un enorme error venerar al “periodismo ciudadano” como un tótem.


4 comentarios:

  1. Hi ha sectors, com el de la moda o la tecnologia, on els bloggers estan igual de considertas o més que els periodistes a l'hora de donar informació.

    ResponderEliminar
  2. Creo que es relevante la aportación al Periodismo que hacen las personas que presencian un acontecimiento y que envían imágenes/contenido sobre ello a los medios. Pero, tal y como recalca el post, la “contribución ciudadana” sirve para ampliar o completar las noticias, nunca para substituir la figura del periodista. Solo así se podrá garantizar la calidad de la información

    ResponderEliminar
  3. Creo que el "periodismo ciudadano" ha sido una revolución y que se da mucho valor a la información que pueda aportar una persona anónima. No obstante, estoy de acuerdo con el hecho de que los "periodistas ciudadanos" no pueden (ni deben) sustituir a los periodistas "de verdad", ya que estos pueden aportar mucho más valor a las noticias y reportajes y son capaces de tratar los hechos con más profundidad. Por no decir que escriben bastante mejor!

    ResponderEliminar
  4. Cèlia, em sembla que t'equivoques en el diagnòstic. El periodisme ciutadà no fa referència a "especialistes" en una matèria concreta. El perfil que comentes és similar al d'un expert que escriu una tribuna en un diari i que no són periodistes. En els casos que comentes, podríem parlar més d'influenciadors i de líders d'opinió a la xarxa, que no periodisme ciutadà.

    ResponderEliminar