La crisis está cambiando en pocos años nuestra manera de ver y de estar en el mundo. Y nuestro ‘yo consumidor’ no es una excepción. Los valores de los consumidores están en pleno proceso de revisión y evolución. La aparición de nuevas tendencias es constante, apenas nos enteramos de una que ya se habla de la nueva.
Esta revisión de
la sociedad de consumo se hace además en plena eclosión del mundo digital, que
ha cambiado radicalmente la forma que tienen los consumidores de relacionarse
entre sí y con las marcas.
La dinámica
interna de las empresas y el proceso de toma de decisiones también se han visto
profundamente afectados por la crisis. Hay que luchar por destacar en mercados
cada vez más saturados y con unos consumidores empobrecidos. Sin olvidar la
presión por obtener resultados y ser cada vez más eficientes con menos
recursos. Esta dinámica lleva a menudo a pensar en lo táctico y olvidar la estrategia
a medio y largo plazo. Los equipos de marketing y comunicación deben tomar
decisiones rápidas, promocionar sus marcas sin saber muchas veces cómo los
consumidores van a interpretar sus acciones.
Pero hoy más que
nunca es vital escuchar y conocer al consumidor. Sus valores, sus expectativas,
sus necesidades cambian cada día y se adaptan a un presente y futuro
inciertos. No debemos permitir que la urgencia de lo inmediato nos deje sin
espacio para la reflexión.
Aunque para las
marcas nunca ha sido más fácil entablar conversaciones con sus clientes, nos
encontramos ante una paradoja: a pesar de la comunicación rápida, directa y
constante con el target y la cantidad ingente de feedback que recibe la marca,
esto no siempre es suficiente para encontrar oportunidades y ventajas en el
mercado.
La investigación
de mercados, que tradicionalmente se ha encargado de recoger e interpretar la
realidad del consumidor, tiene que reinventarse y adaptarse a este nuevo
escenario. Para ser útil debe aportar reflexión estratégica, sacar partido de
toda la información disponible. Ver el bosque que los miles de árboles no nos
dejan ver. Convertir el Big data en
conocimiento accionable e inspirador para las marcas. ¡Y todo esto en el menor
tiempo posible y adaptándose a presupuestos ajustados! El mundo digital, además
de ser un espacio ineludible de contacto con el consumidor, es el aliado para
conseguir estos objetivos.
Si algo bueno nos han aportado las redes sociales es que las empresas se ven obligadas a cuidar mucho mas sus productos/servicios. Cualquier error se puede cnvertir en una avalancha de criticas en Twitter o Facebook que perjudica la imagen de la marca.
ResponderEliminarM.C.P. No sé si seremos capaces de absorber todo la informació que tenemos a nuestro alcance. Tanta información puede acabar matando la iniciativa. Estoy de acuerdo en que el mundo digital es un aliado pero a la vez es un aliado que, en muchas ocasiones, se hace muy difícil de controlar.
ResponderEliminarPara que un estudio de mercado sea útil, tiene que aportar criterios claros!.
ResponderEliminarLa diferencia entre datos y conocimiento es el análisis que permite un conocimiento profundo y esclarecedor.
El exceso de datos actual llega a entorpecer la decisión. En cambio el conocimiento aporta claves para encontrar oportunidades donde otros no son capaces de ver nada.
MUY CIERTO, MONICA!
Totalment d'acord. Però no és menys cert que ara mateix es fa molt difícil poder digerir tota aquesta informació i poder utilitzar-la satisfactoriament
ResponderEliminarLes xarxes scials ens aporten molta informació sobre el consumidor, però aquesta informació també ha de ser analitzada amb una certa distància, per la quantitat, sovint indiscriminada, de missatges i dades que es difonen a Internet. Saber aprofitar les possibilitats del món digital però sense deixar de banda les eines tradicionals de la investigació de mercats és potser l'única manera de trobar oportunitats en un món tan competitiu.
ResponderEliminarEscuchar y conocer al consumidor debería ser la clave para conseguir buenos resultados de negocio, ahora y siempre. Pero es cierto que actualmente es más necesario que nunca saber cuáles son los valores, expectativas y necesidades de los consumidores. Esta es la única vía para ofrecerles lo que realmente están dispuestos a consumir.
ResponderEliminarAnte el cúmulo de informaciones que nos encontramos, como consumidores, a la hora de seleccionar un producto o servicio, se agradece encontrar marcas serias que difunden información veraz
ResponderEliminarEn un universo digital tan accesible para todo el mundo, el reto es discriminar entre los datos y la información, entre lo esencial y los contenidos "vacíos", que solo generan ruido y ocupan un "espacio" innecesario en la red.
ResponderEliminarLos institutos de investigación q sean capaces de combinar ambos medios -on y off-line- y discriminar entre información y datos serán enormemente valorados y demandados por los equipos de marketing de las marcas de fabricantes.